LACAYOTES Y OTROS RELATOS
Cada relato es una pantalla que muestra situaciones disímiles; en “Lacayotes”, la competencia desde la perspectiva de un niño capitán de su equipo de béisbol, en “Space Oditty”, la extraordinaria experiencia de un astronauta, en “Agua fría”, el episodio de un diseñador procrastinador cómplice de su propio fracaso, en “Memorias de un encuentro imposible”, la trascendencia eterna del amor a través de un espectro, en “La pichanga”, la peculiar hazaña de un futbolista de barrio, en “La mano que sujeta la rama”, la eternidad a través del triste desenlace de un alpinista, en “El momento es eterno si lo puedo soñar así”, la narración lúgubre de un hombre que no se resigna a dejar de ver y a perder al amor de su vida. Entre otros muchos relatos breves que espero puedas disfrutar.
"Porque hay que romper las paredes de lo consabido, lo preparado, lo resuelto; Hay que abrirse a la novedad potencial de cada instante". - Julio Cortázar
ALGUNAS OPINIONES SOBRE MI LIBRO
¿QUIERES EL LIBRO EN FÍSICO?
GRACIAS POR TU APOYO
Si descargaste mi libro, lo leíste y te gustó, puedes apoyarme pagándolo, puedes hacerlo por cualquiera de estos medios, solo S/. 5.00
TE DEJO CON ESTE RELATO CORTO QUE ES PARTE DEL LIBRO Y UNO DE MIS FAVORITOS
LA CARRERA
A Estéfano, Benjamín y Alessandra Lazo,
que las riñas fortalezcan la hermandad.
Inicia la carrera, los vehículos van a la par, ambos conductores con el ceño fruncido muestran determinación, la velocidad lo es todo aquí, no importan las curvas ni las imperfecciones de la carretera, por momentos los vehículos parecen volar por los aires, guiados por tan sagaces conductores.
Un agujero en la carretera hace que un conductor pierda el control del vehículo el cual termina dando vueltas de campana a un lado del camino, el conductor corre tras su vehículo. Su rival sigue la carrera con una disimulada sonrisa dibujada en su rostro en celebración por la desgracia de su contrincante que le da una considerable ventaja, el conductor casi ileso vuelve a tomar control del vehículo y entra al circuito nuevamente, el rival se acerca a la meta mientras el accidentado conductor da al máximo sus fuerzas, no concibe la idea de perder la carrera y menos contra su hermano menor.
Ya estando ambos muy cerca a la meta, escuchan el grito de mamá:
- ¡Chicos! ¡Vengan a almorzar!
Ambos conductores dejan sus vehículos al costado del jardín y van abrazados a la cocina, guiados por aroma del estofado de mamá.
La carrera continuará después del postre.
LIBRO
Lacayotes y otros relatos
1ra edición: Septiembre 2022
IBSN 979 8 354456 29 1
lacayotes.willylazo.com